Fármacos y Medicamentos para el Diabético

El principal tratamiento para la diabetes tipo 1 es la administración de insulina. La forma de hacerlo es a través de inyección o a través de una bomba de insulina subcutánea. En el primer caso se inyecta la dosis pautada de insulina por el médico, con una jeringa de insulina dentro de la capa de grasa, justo debajo de la piel (tejido subcutáneo). En el segundo caso la insulina se administra de forma más sofisticada a través de una bomba de insulina subcutánea. Estos dispositivos computarizados son pequeños y están preparados para entregar la insulina debajo de la piel. La bomba dura muchos años, pero la reserva de insulina, los tubos y el equipo de infusión se cambia con mucha mas frecuencia.

Sin embargo para la diabetes tipo 2 no se administra insulina, ya que estos pacientes fabrican todavía insulina aunque no de manera eficaz. En estos casos se les administra fármacos antidiabéticos orales, tipo Metformina que son medicamentos con efectos hipoglucemiantes. En el caso concreto de la metformina también tiene efectos antihormona del crecimiento por lo que no se podrá administrar en a niños o adolescentes diabéticos tipo 2 ya que todavía están en etapa de crecimiento. Estos antidiabéticos orales de síntesis química ayudan a controlar los síntomas de la enfermedad pero no van a las causas reales del proceso. La mayoría de los médicos no instruyen en el cambio de estilo de vida natural que necesitan estos pacientes para vencer la diabetes tipo 2 a través de la alimentación, el ejercicio y los hábitos saludables. Todas estas medidas deberían ser prioritarias, y si fuera necesario tomar algún complemento natural. En última instancia se debería recurrir a los fármacos pero por desgracia los primeros recursos usados por la medicina moderna son este tipo de medicamentos.